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El obispo de San Isidro Oscar Ojea, presidente del Episcopado, participó en la Semana Social 2018 en Mar del Plata. En su discurso, frente a la gobernadora de la provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, Ojea se refirió a las consecuencias que está produciendo el ajuste que el gobierno nacional está implementando, señalando que “lamentablemente pareciera optar por agravar aún más las desigualdades”.
En la apertura del encuentro el obispo criticó la política social del gobierno nacional: “Pensamos sinceramente que el nivel de inequidad en la sociedad en que vivimos es enorme y cada vez se acentúa más” indicó, en referencia a la situación económica de la Argentina; y enfocó su mirada en la desigualdad, ya que: “el 60% de los argentinos asalariados gana menos de 15 mil pesos por mes”. Y agregó en referencia a las protestas sociales que se acentúan con el paro del lunes 25: ”Ante esa realidad es imposible que la Iglesia no deje de afirmar que al ajuste no lo tienen que pagar los pobres”.
Luego, con palabras que parecían dirigidas directamente a la política del gobierno, y en especial a la gobernadora Vidal, quien días atrás había minimizado la posibilidad de que la gente de bajos recursos estudie en la Universidad (“todos los que estamos acá sabemos que nadie que nace en la pobreza en la Argentina hoy llega a la Universidad… y que… no hay una sola provincia que pueda garantizar el jardín de infantes a todos…”, había dicho Vidal); Ojea explicó: “Si nos escuchamos solo a nosotros mismos tapamos el grito verdadero del pobre. Cuando nos apuramos a dar recetas de escritorio, seguimos escuchándonos a nosotros mismos. Es necesario ser testigos directos de la necesidades que se expresan, de lo contrario caeríamos en la contradicción de hablar mucho de los pobres, pero estar demasiado poco con ellos” concluyó, recordando el eslogan de campaña del PRO de llegar a la “pobreza cero”.
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