Por supuesto que es necesario un acuerdo, que hace falta discutir con el FMI, que la inflación se dispara y que la crisis aumenta dÃa a dÃa. Se proponen medidas de todo tipo, hay discusiones e ideas, más o menos buenas o no tanto, pero hay una negación incomprensible hacia un sector importante de la población: los mayores de 60/65.
Si, los jubilados son un estorbo. La mayorÃa ya no trabaja... apenas pueden vivir si lo siguen haciendo en forma informal o son ayudados por sus hijos o nietos. Oficialistas u opositores, ganadores o perdedores de las elecciones, parecen esperar que la vida y el pasar del tiempo se encarguen de que los mayores dejen de ser un problema.
Pero no, estos parecen encapricharse en vivir cada vez más y, como no pueden hacer huelgas, por ejemplo; como están limitados en su capacidad de movilización, como no inciden tanto en la economÃa, tal vez, por eso, son convidados de piedra en cualquier acuerdo son, indefectiblemente: el último orejón del tarro.
Por supuesto, son pocos los que se acuerdan que hoy la vida se extiende para los humanos pero que, tarde o temprano e indefectiblemente, la ancianidad alcanzará a todos los que no mueran antes.
Buena suerte para los jóvenes, ojalá no tengan que llegar nunca a la triste realidad de ser los últimos en la escala social.
Link Permanente: http://www.prensalibre.com.ar/index.php?id=16059
|