El Tribunal Oral Federal (TOF) N° 1 de San Martín, a cargo de la jueza, Marta Milloc, suspendió el comienzo del juicio por los asesinatos de Orlando Marino y Silvia Meloni, pertenecientes a la megacausa de derechos humanos conocida como Campo de Mayo, y que debía comenzar el martes último (2-5), tras una suspensión similar en abril.
Las víctimas –que fueron asesinadas el 2 de agosto de 1976, al anochecer, en una estación de servicio situada en avenida Santa Fe esquina Pacheco, de Martínez- son representadas por la fiscalía y la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación, es decir, no tienen querellantes particulares ni de organismos de derechos humanos.
Por el hecho están acusados el entonces comisario de Martínez, Oscar A. Mateo; el oficial de la “bonaerense”, Ángel R. Salguero; el ex general, Santiago Riveros, jefe del comando de Institutos Militares y el ex coronel, Luis Sadi Pepa, jefe del área 420 San Isidro (ambos perdieron el grado militar por las atrocidades que cometieron durante la dictadura).
De acuerdo a lo informado por la Comisión por la Memoria la Verdad y la Justicia Zona Norte (CMVJ), el juicio se postergó por falta de juez subrogante, tanto en abril como ahora, y para el organismo de derechos humanos “la falta de conformación de Tribunal no tiene solución en lo inmediato, por lo tanto no hay fecha de inicio a futuro”.
El TOF N° 1 de San Martín tiene también al juez Diego Barroetaveña, reemplazante de la jueza Lucila Larrandart que se jubiló hace seis años, pero necesita otro reemplazo (“subrogante”, tal la denominación formal) para el juez Héctor Sagretti, que se excusó de seguir juzgando causas de derechos humanos hace 3 años, informó la Comisión.
“Con veintiún juicios por realizarse, la Causa Campo de Mayo es la muestra más acabada de impunidad” evaluaron desde la CMVJ, que junto a comisiones de otras jurisdicciones advirtieron: “Desde la asunción del Gobierno de (Mauricio) Macri, hemos señalado cada uno de los retrocesos en materia de Juicio y Castigo a los genocidas”.